Harri Larunbe

Harri Larunbe

Harri Larunbe

Sala Plataforma> Instalación

2008-04-18 / 2008-06-01

Imagen.

Este proyecto de Harri Larunbe es un proyecto de imagen. Trampantojo, simulación, engaño. Parece, visto así, un relato de figuras que penetran en la niebla, o que sufrieran una suerte de deslumbramiento de una energía situada enfrente suyo.

Personas reales -como en el anuncio de cosméticos- que han sido atrapadas en la calle absolutamente desprevenidas. Son peatones, ciudadanas, caminantes capturados por la cámara del espía. Ya en el estudio del artista, se convierten en dibujos enfrentados al soporte pictórico; sombras en el plano de coordenadas X-Y.

Como en una revisión de la camera obscura renacentista son imágenes insinuadas sobre la pantalla. Algo que recuerda a las que aparecen en el techo de la habitación, a través de la persiana, en una tarde de siesta de verano.

Al mirar el proyecto es imposible no acordase de Canogar o el Xabier Morras de hace 30 años.

Muro.

Pero además, es un proyecto de figuras en el muro (a punto de ser) atrapadas, engullidas, devoradas. Ante la escena representada, el espectador se ve activado a mirar detrás para encontrar de dónde procede ese poder caníbal y lo que encuentra es otra figura que penetra, esta vez, en sentido contrario. Y este golpe inesperado reordena la obra y focaliza nuestra atención en el soporte de esos 10 milímetros de grosor, blanco. Un soporte convertido en “condensador de energía”, que contiene lo que no vemos y que está más allá de la superficie.

Del plano, al espacio de coordenadas X-Y-Z. Porque el muro-contenedor no es otra cosa que panel de montaje. Bosque de paneles que articulan el espacio expositivo, pero que esperan ser ensamblados para formar un cubo. Bricolaje para crear un nuevo dispositivo y prolongar los posibles recorridos de la obra.

Espacio y tiempo.

Espacio comprimido y tiempo congelado en 10 mm. Espacio expandido y tiempo prolongado por el espectador. Bucle de espacio y tiempo en recorrido circular. Caja dentro de caja. Caja desmontada o a punto de ser montada. Cubo negro de Huarte y cubo blanco en Huarte.

Espacio y tiempo comprimidos. Espacio y tiempo expandidos. Un espacio y un tiempo que son espacio y tiempo contemporáneos. Los de la globalización y la cultura vernácula, los de la huerta y la tele-presencia, los de ir al pueblo en fiestas y el fin de semana a Cancún.

Harri Larunbe.

El huartearra Harri Larunbe pertenece a esa nueva generación de jóvenes que han centrado su empeño en una preparación sólida en el terreno de las artes visuales. Lejos, muy lejos de trasnochadas visiones del artista como héroe autodidacta que solo atiende a sus pulsiones interiores.

De ello dan cuenta sus estudios en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad del País Vasco y en la Kunst Universität de Linz (Austria). Su obra ha sido distinguida en certámenes de ámbito local y exhibida en varias exposiciones colectivas.

Es un artista que comienza en un mundo no siempre fácil, aunque lo hace con el buen equipaje de su preparación, sus proyectos y su sensibilidad. Hay que desearle la mayor de las fortunas.

Jabier Villarreal Armendariz