Comisario: Octavio Zaya.

Sea de una escritora que realiza películas y cortos experimentales, o de una artista que asume los atributos que caracterizan al cine y la televisión, la obra de Keren Cytter ha despertado un enorme interés internacional entre museos, centros alternativos y galerías, tanto por la forma como por el contenido; por las formulas y procedimientos que emplea para entrelazar uno con otro, y por la manera en que disuelve uno en el otro. Cada una de las tres piezas que Keren Cytter presenta en esta primera exposición en España —Repulsion, Dreamtalk y Mfpig— nos acerca a los términos y parámetros por los que su obra ha venido acaparando la atención de instituciones artísticas tan prestigiosas como exigentes.

A medio camino entre los estilos, los preceptos y la estética de la Nouvelle Vague francesa, los filmes de Dogma y el vídeoarte, las obras de Cytter discurren a través de narrativas que se debaten y resuelven indistintamente entre el cine documental, el melodrama y las comedias de situación (sit-com). A partir de guiones de la propia artista, asistimos a un despliegue
Vídeo instalación Repulsión interpersonal de relaciones que se concentran en torno al deseo y al recuerdo, al sexo y al amor, a la crueldad y al temor, a
la envidia, al odio y a los celos. Casi un escaparate de curiosidades en torno a la identidad, la conciencia y el carácter; este microcosmos de contradicciones favorece por igual lo trágico y lo cómico, lo superficial y lo profundo, la sutiliza y la banalidad de lo cotidiano, la indiferencia y la añoranza.

“El humor procede de la vergüenza y las partes serias vienen del estrés”, asegura Cytter. Pero la artista no controla ni unos ni otros. Lo que se propone, en todo caso, es dotar a la obra de una estructura estable, que tenga algún sentido, cualesquiera que sean éstos.

Esa estructura y este sentido se fundamentan siempre en el guion, que Keren Cytter proyecta en escenarios que se corresponden con lo que se viene llamando estética de fregadera, estética casera. Dicho de otro modo, las representaciones intersubjetivas de las realidades y relaciones sociales que nos presenta se desarrollan siempre a partir de un constante desafío, textual y cinematográfico, que considera la realidad y la ficción como elementos intercambiables de experimentación, entre la imperfección de la realidad que presenta y la producción cinematográfica casi amateur, por un lado, y la sistematización textual y de ficción, por otro. En cualquier caso, una se confunde en la otra, y hasta el propio guión forma parte del escenario cotidiano de estas películas casi caseras. Si por un lado la situación parece artificiosa, por otro se fundamenta en un realismo
crudo.

Los escenarios son en su mayoría apartamentos baratos, apenas decorados, de dormitorios desordenados o, en muchos casos, sólo basta una cocina para la acción. Pero esto se contrasta con diálogos y tramas sofisticadas y hasta inverosímiles que a veces se superponen y se contrastan, a veces vuelven sobre sí mismos, y hasta se repiten, como para ilustrar la incomprensión. El aislamiento y el distanciamiento que muchas veces origina las dificultades y malentendidos de las relaciones personales. En una de sus películas, un personaje afirma que “Era temprano ese día, pero tarde en el guión”, y en otro corto, una chica dice: “Creo, no sé, creo que era mi voz que se entrometía desde otra escena”.

Entre lo cómico y lo extraño, lo artificial y el realismo Dreamtalk (2005) nos presenta a una pareja y a un amigo en una extraña estructura de deseo encadenado: el amigo está enamorado de la novia de su amigo, pero a ella sólo le interesa su novio y al novio sólo le interesa una chica de un programa de reality de la televisión que se plantea el dilema de elegir entre el ganador y el perdedor. Este corto, desarrollado enteramente en la cocina -como muchos de los cortos de Cytter- parece estructurado como si se tratara de un episodio de una telenovela. El diálogo parece intenso, pero a veces parece como si fuese aprendido de memoria, como si fuera recitado, y a veces los personajes parecen continuar la conversación, pero no mueven los labios, como si continuaran con sus pensamientos. Todos se hablan entre sí, pero nadie parece estar escuchando a los otros. Al final las voces se entrecruzan y sobreponen entre sí para conformar una suerte de ritmo intenso de incomprensiones y distanciamiento.

Mfpig (2006) se centra en las relaciones de un grupo de amigos, y no se desarrolla en un escenario único sino en diversos espacios: el estudio del artista, un bar, la casa de la madre, la casa de una pareja, etc. La estructura parece desenvolverse a partir del descubrimiento de la sífilis del personaje/artista principal, pero se entrelaza con la vida apacible y aparentemente estable de una pareja con un niño, cuyo marido ha decidido suicidarse y dejarle su mujer y su hijo al personaje/artista. La historia parece tan inesperada como el libro que parece ser el motivo principal de la relación entre la pareja y el personaje principal, pero la verosimilitud poética de la relación entre ellos confunde nuestro sentido hasta trascender esa maleable barrera entre la realidad y la ficción.

Repulsion (2006) está compuesta de tres cortos basados en la película homónima que Roman Polanski realizó en 1965 (en esta legendaria obra de Polanski el personaje principal, que interpreta Catherine Deneuve, trabaja en un salón de belleza de Londres y vive con su hermana. Mientras ésta se encuentra de vacaciones en Italia, Catherine mata a un pretendiente y lo tira en una bañera llena de agua. El episodio parece distraerla y se olvida de pagar el alquiler. Cuando el casero aparece para reclamar el pago e intenta acostarse con ella, también lo mata y lo enrolla en una alfombra. Cuando la hermana regresa, encuentra los dos cuerpos y a Catherine inconsciente bajo la cama). Después de ver la película de Polanski, Keren Cytter decidió “realizar tres cortos que se concentraran sobre la protagonista y los dos personajes secundarios. La interacción entre los tres personajes crearía tensiones que conducirían a una muerte cruel al final de cada corto. Los personajes cambiarían de papeles -el asesino de una película sería la víctima en la segunda, y el testigo en la tercera, y viceversa-. De esta manera los tres cortos sirven como tres capas de una película sin argumento. Estos cortos no cuentan ninguna historia específica, y las acciones de los personajes son siempre arbitrarias”. En conjunto, los tres cortos reflejan sentimientos de repulsión, alienación y claustrofobia. Para Cytter, todos estos sentimientos se concentran sobre el mismo personaje que lentamente la conducen a su final.

Como en esta pequeña obra magistral, Keren no sabe hacia dónde desarrolla su obra en estos momentos, ni tampoco si ese desarrollo es lineal. Lo que parece evidente es que sus obras se conducen en todas las direcciones, y aunque parezcan ser callejones sin salida, han conseguido conformar una obra originalísima sobre sobre la realidad y sobre el lenguaje.

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Texto Comisario expo Keren Cytter

Keren Cytter

Keren Cytter nació en Israel en 1977, estudió pintura en el Instituto Avni de Tel- Aviv, y trabajó como reportera de arte en un periódico israelí antes de trasladarse a Ámsterdam en 2002 con una beca para de Ateliers, donde emprendió y desarrolló su estética experimental de vídeo. Su obra ha sido expuesta en numerosos museos, instituciones europeas y bienales.

Entre sus exposiciones individuales destacan las realizadas en el Kunsthalle de Zurich; Frankfurter Kunstverein, de Fránkfurt; KW Institute for Contemporary Art, de Berlín; y en la Galleria d’Arte Moderna e Contemporánea de Bérgamo, Italia. Su obra también ha participado en otras exposiciones presentadas en el Stedelijk Museum, y de Appel en Ámsterdam; en el Irish Museum of Modern Art, de Dublín, y respectivamente en las bienales de Moscú, Lyon, y Herzliya, Israel.

Keren Cytter recibió el prestigioso Balice Art Prize por su presentación en el Art Statements en la edición de Art Basel de 2006. Cytter es una escritora que ha publicado dos novelas, Yesterday’s Sunset y The man who climbed up the stairs of life and found out they were cinema seats.

(Marzo 2008)

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